Cada Abril comienza con un nudo en la garganta, con el recuerdo y la
añoranza de las hermanas perdidas, del anhelo porque nos inunde el coraje y el
valor de nuestras y nuestros héroes combatientes en Malvinas, valor que han puesto
y lo siguen poniendo ante los insistentes intentos de desmalvinización tergiversando la historia, victimizando a los combatientes, librando a su suerte a los veteranos de guerra,
y negando la hipótesis de conflicto frente a nuestros territorios hoy ocupados por el colonizador.


Cada inicio de Abril, las pascuas por venir nos
traen al recuerdo las cruces que hermanas y hermanos han cargado por nosotros,
y que muchos hoy siguen cargando en la pobreza, el abandono, la depresión, en
los dolores de almas desoladas sin ganas de vivir; las cruces ante la falta de
trabajo, de techo, de alimento, de egoísmos, de incomprensiones, de violencias,
y de guerras. Injusticias cotidianas que nos interpelan, nos movilizan, nos
exigen acción; violencias y ultrajes de los Imperios de la avaricia y del dios
Dinero que vuelven una y otra vez en el saqueo para que recordemos que otro Mundo
es necesario y posible.


Para que no olvidemos que otras y otros lo han intentado antes que
nosotros con sus resistencias, y que nuestros Pueblos continúan caminando hacia
la Tierra sin Mal, hacia un Buen Vivir en armonía y abundancia comunitaria, y
que habiendo cargado cruces, genocidios, desapariciones, violaciones y humillaciones…LA VIDA SIGUE RECLAMANDO que sigamos
caminando y renazcamos una y otra vez…HASTA VENCER.




Por ello este 2 de Abril, no solo venia cargado del compromiso sobre la reivindicación
histórica de que LAS MALVINAS FUERON SON
Y SERAN ARGENTINAS, como lo indican las luchas que como un mismo Pueblo de
varias naciones y una misma Patria libramos en 1806,1807,1833 y 1982; luchas
que van marcando nuestro insistente reclamo por recuperarlas y que vuelvan a “Casa”,
y luchas que van indicando que como varias naciones nos encontramos en una
misma historia, un mismo camino liberador, reencontrandonoes en el mismo sentir
patriótico de la Matria que nos hermana. Este 2 de Abril también el Pueblo exigía
que no solo reclamemos, sino que empecemos a ejercer Soberanía; a dar pasos y
gestos sentidos y genuinos de amor y coraje que demuestren el avanzar a pesar
de las trabajas de malos gobiernos y de intereses económicos transnacionales y
locales que le dan la espalda a las necesidades de nuestras comunidades y
saquean nuestro bienes comunes.
Fue entonces que nos adentramos a
las aguas marrones, crispadas e inmensas de nuestro Río de La Plata para
acercar las aguas marítimas que besan las orillas de nuestra Patagonia, islas
Malvinas y abrazan nuestra Antártida. Embarcarnos para tender puentes donde el
colonizador y el maligno nos quiere divididos; tender un puente desde el Canal
Magdalena que necesitamos recuperar como ruta hacia nuestras Islas Malvinas.
Puentes para reencontrarnos en la Patria, en sus aromas, en sus aguas, en sus
latidos, en el afecto, en el compartir las lenguas maternas, en el encuentro de
nuestras culturas, en las formas ancestrales y propias de alimentarnos, en el
cuidar a otros y cuidarnos…allí estaba esperándonos LA PATRIA para rescatarnos
de la orfandad.
Desde el puerto de La Plata salimos embarcados capitaneados por
Trabajadores de la Pesca Artesanal a la bolla N°6 y desde el viejo espigón de Punta Indio a la bolla N°1 a tender un “Puente”;
a plantar bandera, a decir presente, a cantar con emoción el Himno y la
consigna “Patria Si, Colonia No”, motivados por nuestros afectos que empujaban
desde los muelles, desde las barriadas nuestras, desde los campos y fabricas “ajenos”,
desde las calles y rutas caminadas, desde las cruces cargadas y las lágrimas de
madres con los corazones atravesados por siete espadas de dolor. Embarcamos
empujados por la PATRIA para
reencontrarnos como hermanas y hermanos de un mismo proyecto de Liberación.










El mejor homenaje a nuestras y nuestros héroes de Malvinas, a tantas y
tantos mártires que dieron testimonio de Vida para que no detengamos el caminar,
por más caídas que se presenten; la acción
correcta en un momento de tanto abandono y desolación, son estos pasos pequeños,
y grandes al mismo tiempo, donde nos reencontramos y reconocemos, donde
volvemos al terruño y a los afectos primarios que nos sostienen y reafirman las
rebeldías necesarias a tantas injusticias, y nos unen para seguir construyendo
el renacer de las próximas revoluciones amorosas y eficaces por venir.
OTRO MUNDO ES NECESARIO Y POSIBLE; Y SI SABEMOS ESCUCHAR RECONOCEREMOS SU SUSPIRO
COMO CONOCIDO Y QUE LA LLAMADA DE SUS
LATIDOS YA ESTAN ENTRE NOSOTROS.

Madres con niños sin pan
Sin lugar, sin hogar
La inocencia quebrada
La vida reclama
La vida reclama
Hombres de oscuro dolor
Piquete y tambor
Todo ardiendo en fogatas
La vida reclama
La vida reclama
Vamos por la libertad
No dejemos pasar
Su violencia insaciada
La vida reclama
La vida reclama
Gente que no halla rincón
Ni respuesta ni amor
Guerra eterna y callada
La vida reclama
La vida reclama
Cuerpos tirados al mar
De la infamia total
Que no ha sido olvidada
La vida reclama
La vida reclama
Soy el que planta la flor
Y defiende el amor
Dice el hombre y avanza
La vida reclama
La vida reclama
En la locura imperial
La pobreza es el mal
Que se ataca y se mata
La vida reclama
La vida reclama
Enajenado el amor
La codicia es cañón
Y la gente carnada
La vida reclama
La vida reclama
Soy el que quiere vivir
El que quiere seguir
Levantando su casa
La vida reclama
La vida reclama
Vienen por más y por más
Acribillan la paz
Bendiciendo sus armas
La vida reclama
La vida reclama
En nombre de qué deidad
Matarán, matarán
Como fieras cebadas
La vida reclama
La vida reclama
Soy el que quiere vivir
El que quiere seguir
Levantando su casa, ah-ah
Dónde hallará el porvenir
La canción sin final
Que la vida reclama
La vida reclama
La vida reclama
La vida reclama
(canción:La Vida Reclama, de
Teresa Parodi)